El Cazador de Hadas

De pronto lo comprendí, no tuve que indagar, ni darle vueltas; como un despertar repentino me vino a la cabeza, y entendí que ya no había nada que hacer.

Creí sentirme aliviado, sin hora de vuelta, libre del tiempo y del espacio frente al hada del conocimiento y del saber, rodeados por la ingenuidad, la curiosidad sin limite y el asombro continuo.Cada revelación se encontraba precedida de la máxima expectación posible y era seguida de un grito ahogado que denotaba fascinación. Verdades hechas mentiras y mentiras hechas verdades; un sorvo de café, una calada al cigarrillo, esa figura abstracta que dibuja el humo entre los dos y al momento soledad.

Me encuentro de nuevo solo y sin respuestas.

Es de noche, huele a humo de un posible cigarro aliñado, veo todo a mi alrededor sin necesidad de levantar los párpados, conozco este lugar y a los que están con migo.

Un resplandor abre mis ojos como abre una llave un cerrojo, al momento otro, y después otro y otro; miles de de pequeñas luces de colores parpadean haciendo así estremecerse mis pupilas.

Ella, se presenta como Amanda el hada amadora y me susurra al oído la raíz de mi verdadero nombre, amado. Lo sabe todo sobre mi, sin necesidad de analizarme y no duda a la hora de hacérmelo saber para que así me pueda descubrir a mi mismo y entender lo que siento. La observo y ella sabe que lo hago,rehulle mi mirada hasta que nos encontramos y entonces, no puedo aguantar el brillo, no consigo soportar el destello de un hada y caigo derrotado.

Dormido creo estar soñando, mis sentidos quedan desprovistos de control, diferentes sonidos, olores y sensaciones campan a sus anchas por todos los resquicios de mi cuerpo, con una sola excepción, la imagen borrosa de un ser que se posa sobre mi y con voz profunda me advierte;

_No puedo indicarte el camino exacto puesto que ni yo ni nadie lo sabe, los tiempos en los que se creía en Eldes y en Tino pasaron, y ellos con estos. La vida como una gran montaña se ha de escalar por medio de la experiencia, ten la precaución de atarte bien el cabo a la cintura pues cairás y no has de rendirte.
_¿Por que me cuentas esto?, ¿Por que me atormentáis?,¿Quienes sois?
_No me queda tiempo, el viene a por mi. Jamas dejes que te quiten la imaginación, poca es la que queda para abrir puertas a otros mundos y sensaciones.
_ ¿El?,¿A quien te refieres?
Una vez más silencio... Al silencio le siguió una ráfaga de viento que furtivamente se cuela cada noche por la fina rendija que queda entre el marco de la ventana y la pared, tras esta una sola imagen golpea con fuerza entre mis sienes.
La realidad es un disparate calculado infinitamente interpretable.

Nunca pierdas la imaginación, ya que esta es, la llave que abre la puerta a otras realidades.


No temas al Cazador de Hadas.

D.V.